420 hectáreas en Savegre, Aguirre, con 200 hectáreas de bosque primario.
Con dos ríos, el Cascada y el Hatillo, atravesando la propiedad y alrededor de 20 riachuelos.
Accesible a través de caminos de lastre bien mantenidos desde San Isidro del General y Quepos.

Ubicada en el corazón de Savegre, Aguirre, esta finca ofrece una extensión de 420 hectáreas de belleza sin igual. Con más de 200 hectáreas de bosque primario y una abundancia de diversa flora y fauna, esta finca brinda una riqueza biológica incomparable.

Anteriormente utilizada como pastizales y potreros, la propiedad fue arrendada a la Transnacional Stone Forestal, que plantó madera de Melina para el mercado de astilleros. Estas áreas pueden ser fácilmente reutilizadas sin restricciones de uso del suelo.

La topografía de la finca es semiondulada, con áreas planas, colinas y montañas, con un perfil que forma un valle que culmina en el Río Hatillo. Se destaca por el nacimiento de dos ríos, el Cascada y el Hatillo, este último recorriendo al menos 5 kilómetros dentro de la propiedad. Además, cuenta con alrededor de 20 riachuelos, manantiales, pozas y una magnífica cascada, que exhiben el esplendor de sus recursos hídricos.

La finca está libre de gravámenes y cumple regularmente con las obligaciones fiscales.
Accesible desde San Isidro del General y Quepos, la finca se beneficia de caminos de lastre bien mantenidos, garantizando facilidad de acceso desde Hatillo en adelante.

Situada en proximidad a encantadores pueblos como San Miguel, Dos Bocas de Aguirre y Las Nubes, la finca disfruta de una ubicación serena pero accesible. Destacable es su participación en el programa de Pago por Servicios Ambientales de FONAFIFO, con 117 hectáreas designadas para la conservación. Además, al ser parte del Corredor Biológico "Paso de la Danta", ha contribuido a programas de estudio de especies realizados por el Ministerio de Ambiente.

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